por Rodolfo Andreu
El consumo moderado de cerveza tiene muchos beneficios para la salud, descubre el potencial que ofrece esta bebida.
El estilo define los parámetros de una cerveza: de color claro, de mucho cuerpo o ligera, muy amarga o dulce, turbia o filtrada, con especias o frutos que le den carácter.
La cerveza es una bebida ideal para compartir y brindar, pero eso no es todo: mejora la respuesta del sistema inmune, posee un gran poder antioxidante y además podría tener beneficios adicionales en la prevención de enfermedades cardiovasculares. Además de ser una bebida refrescante o embriagante, es un alimento versátil y nutritivo.
El estilo define los parámetros de una cerveza: de color claro, de mucho cuerpo o ligera, muy amarga o dulce, turbia o filtrada, con especias o frutos que le den carácter.
La cerveza es una bebida ideal para compartir y brindar, pero eso no es todo: mejora la respuesta del sistema inmune, posee un gran poder antioxidante y además podría tener beneficios adicionales en la prevención de enfermedades cardiovasculares. Además de ser una bebida refrescante o embriagante, es un alimento versátil y nutritivo.
Si pensamos en la cerveza como un alimento, es posible que después de consumir todos los días la misma bebida nos canse su sabor. Más allá de lo que se puede pensar, en México hay una gran oferta: al margen de las grandes industrias cerveceras, un grupo creciente de microcerveceros que ofrece estilos diferentes, ha conseguido poco a poco divulgar sus propuestas, imprimiéndoles un toque distintivo.
La gama de cervezas es muy amplia y a su vez muy poco conocida, esta bebida va mas allá de ser una bebida refrescante o embriagante, es un alimento versátil y nutritivo. Al final no importa que estilo se deguste ni a que hora del día se consuma, lo que importa es que la cerveza te hará brindar y consumida con moderación nos traerá salud.
Derribando mitos
La panza chelera
La premisa es que la cerveza es la causante de esa curva de la felicidad, pero en realidad la “panza cervecera” se atribuye a uno de sus ingredientes: el lúpulo; además de tener propiedades antisépticas, también tiene la peculiaridad de abrir el apetito. Por tanto, la comida alrededor de la cerveza es quien produce esa barriga feliz.
La premisa es que la cerveza es la causante de esa curva de la felicidad, pero en realidad la “panza cervecera” se atribuye a uno de sus ingredientes: el lúpulo; además de tener propiedades antisépticas, también tiene la peculiaridad de abrir el apetito. Por tanto, la comida alrededor de la cerveza es quien produce esa barriga feliz.